El desarrollo de las Comunidades Energéticas Locales está de actualidad en España. El futuro de la transición energética pasa por una mayor libertad y auto gestión de la energía por parte de la ciudadanía y, por ello, desde el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) se elaboró una «Guía para el Desarrollo de Instrumentos de Fomento de Comunidades Energéticas Locales«.
Dicho documento establece las bases de la creación de comunidades energéticas y de su futura legislación en España. Asimismo, aporta ejemplos europeos de proyectos ya implantados en otros países cercanos.
¿Quién puede impulsar una comunidad de energía?
Cualquier agrupación de individuos puede tomar la iniciativa de constituirse de forma legal en asociación, organización sin ánimo de lucro, empresa, cooperativa… y un largo etcétera de colectivos que a efectos energéticos quieran recibir beneficios medioambientales y reducir su dependencia energética y consumos.
¿Cuáles son los primeros pasos?
Las comunidades energéticas basan su potencial en la unión de individuos y, por ello, el primer paso para su constitución es crear un colectivo de personas interesadas en una misma comunidad. Todos ellos, por supuesto, deben tener un interés en común: la sostenibilidad.
Tras esto, contactar con una persona o entidad especializada en energías renovables, que les asesore sobre cómo desarrollar su idea.
La tecnología, la base de las comunidades renovables
La tecnología y la innovación es la base de estas comunidades, y su desarrollo lleva aparejada la aceleración de instrumentos para alcanzar el estatus de sociedades inteligentes y eficientes, denominadas «smart cities».
Llámanos al comunicacion@comunidadenergetica.com